En el grupo promotor de Barragán2010 estamos conmovidos con la candidatura de Trinidad Jiménez (en adelante, la Trini) para las elecciones autonómicas de Madrid. Para empezar, nos cautiva el irresistible nombre de su blog, http://www.trini2011.es/, que sigue sin duda la estela de barragan2010 en lo que a garrulismo se refiere. Resulta refrescante una candidata que se respete tan poco. Si su posible contrincante decidiera competir en el mismo campo podremos estar ante una verdadera lucha de titanes entre trini2011 y espe2011. Apoteósico, nada inigualable desde la homérica lucha entre Héctor y Aquiles. Lógicamente, después de semejante contienda, imaginamos que a los madrileños les costará conservar el tratamiento formal de Excelentísima Señora para la vencedora, lo cual juzgamos un adelanto en el acercamiento de la política al ciudadano.
Por otro lado nos emociona que la Trini sea incansable al desánimo. Después de ser paracaidista ya en las municipales madrileñas del 2003 donde sacó un resultado lamentable y gozando de la confortable plaza de ministra de sanidad nos resulta encomiable que esté dispuesta a llevarse la misma ostia en las autonómicas. Y todo porque ciertas encuestas que maneja la elite socialista le confiere un mejor resultado que el del desconocido alcalde de Parla, lo cual nos demuestra la inquebrantable fe del PSOE en las encuestas y su obcecación en darse de tortas constantemente con la misma piedra. Lo cual nos transporta al también mito griego de Sísifo. No aprenden. Después de cristi1999 (por Cristina Almeida), la mencionada trini2003 o incluso el más reciente juanfer2007 (por Juan Fernando López Aguilar en Canarias) deberían haberse dado cuenta que la fórmula del paracaidista con supuesto renombre pero en nada familiarizado con la política local no acostumbra a funcionar. Luego no aguantan ni una legislatura y los acaban chutando a más altas cotas, es decir, el cementerio de elefantes del parlamento europeo.
Para ahorrarle tan innecesario disgusto a la Trini nos atrevemos a sugerirle al PSOE una candidata nueva, con un grado de conocimiento y popularidad mayor si cabe y que sin duda sabrá darle el aire de familiaridad a su candidatura que sin duda desea el PSOE.
¿A qué no hace falta ni decir el nombre? Además el PSOE contaría con la inestimable colaboración del equipo de Sálvame promocionando la candidatura como ya hicieron con Karmele. Todo ventajas. Lástima que Belén probablemente no estaría dispuesta a rebajarse tanto.
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